“La Danza de Sole, Gaia, Lune y Lucero, sobre el Universo”

Texto en prensa. Extracto resumen para mi audiencia. Autora: Cristina Mercader H. Seudonimo Pérgola online Amatista.

En una bella escenografía del tiempo danzan juntos Sole, Gaia Lune y Lucero, sobre el tejado del tiempo y el Universo, para entrenarse en adiestrar las destrezas creativas a las diversas galerías y audiencias del ecosistema terrestre. Ellos se dejan vestir por la Madre Naturaleza, por su indefinible belleza temporal. Danzan por el tiempo, de primavera y verano, por todo el año, día a día de su tiempo, mientras lo cuentan, disfrutan, viven y respiran.

La Tierra es el ecosistema geográfico y los paisajes que la visten su majestuosa presencia. Se deja llamar Gaia por Sole, su amado consorte dorado. El idilio transcurre en millones de lustros, años y milenios desde que fueron elegidos por El Creador para montar escenas, vidas, escenarios de luz y semi sombra junto a Lunes y Lucero.

Cielos, aves, nubes y hojas de árboles tiñen los escenarios donde danzan Gaia,Sole, Junto a Lunes y Lucero cada espacio terrestre de primavera y verano. Juntos son la manivela del tiempo que avanza regresa y se desplaza, por la luminosa eternidad temporal del Universo.

Esta danza magestuosa es un idilio eterno, donde Rey Sole abriga las semillas del Creador, cuando la tierra húmeda está vestida de Reina Gaia. Ella observa, como se desplaza Sole y la invita a descansar por el tiempo de Primavera y Verano, junto a su presencia luminosa. Ambos se visten de otoño dorado, de invierno blanco y de flores de primavera para deleitar al verano, mientras maduran los frutos de la Creación divina.

Sole y Gaia se han visitado, por el Universo y el tiempo, desde milenios de siglos, cada día de danza estival por sobre las cosechas… Ambos se lucen por toda la escenografía que pinta la Madre naturaleza, con un esmero y dedicación autodidacta.

La mirada de Sole sorprende a Gaia a medio despertar de la Primavera, cuando Lune se abraza en los mantos de la noche y duerme junto a Lucero, para cerrar la madrugada y dejar abierto el espléndido amanecer. Gaia sorprendida corre por los prados encendiendo los faroles de cada flor y botón, en señal de empatía por la belleza de los ojos, que dulcemente encandilan a Sole.

El tiempo de la danza comienza justo cuando Lune se abraza a Lucero y suben juntos a la galería de los focos nocturnos. Así, Sole y Gaia eligen sus espacios de viaje por el globo terráqueo, a repartir las semillas del Creador, que cubrirán bajo el manto de Gaia y Sole. Cual dulces novios Sole y Gaia se distribuyen todo el sector del globo que se turna a vivir la danza de la Primavera y el Verano nupcial.

Adquisicion de destrezas sociales y habilidades cognitivas blandas.

El Intelecto emocional corresponde a una zona cerebral particular, relacionada con la comprensión lectora, la expresión gestual no verbal, la capacidad de percibir señales musicales y sonidos de diversa índole. Los sonidos pueden ser integrados y transformados en una determinada creación melódica. Esto es, una información de nivel adquirido más una mímica danzante de nivel corporal con una respuesta motriz fina, o gruesa puede incorporar un proceso imitativo de adquisicion.

Esto es, la activación de un determinado lenguaje en el individuo, desde la primera intervención adquirida del medio, que llega a incorporarse como contenido interno y lenguaje no verbal (propia del sistema nervioso cerrado innato, o natural del individuo). El aprendizaje es lo que permite asimilar y asociar de un modo voluntario y funcional . Esto significa gradualmente poseer un correlato de características prescritas por las neuronas, la morfología fisiologica y estructura, que involucra la consciencia, los umbrales y niveles de sensibilidad, propia de la biología intrinseca de un individuo. Así, cada sujeto puede estar dispuesto a recibir una información, con sus estimulos y contenidos, desde que son detectados como un mensaje, que interviene en la formación de estímulos asimilables, desde el centro receptivo del sistema nervioso.

Estos estímulos son los mediadores que impactan el nivel de la consciencia y son recibidos dentro del sistema nervioso receptor. Esto es, se alteran las células de la fisionomía y naturaleza característica esencial, de nivel eferente, previo a generar respuestas generadas en cada oyente.

La actitud emocional de un sujeto es la dirección afectiva que genera repertorios de respuestas, según cada umbral de consciencia individual, antes y previamente a los estímulos ambientales. Toda dinámica de aprendizaje resulta eficiente cuando se provocan interacciones, mutuos cambios y se impulsan respuestas, que impactan como señales, en el dominio de la educacion y del repertorio socio cultural del individuo.

Una respuesta del sujeto está inmersa en su fisiología medioambiental, desde que le es posible generar una respuesta que elija generar. Una modalidad de hábitos y reacciones individuales genera las adaptaciones y feedback de respuestas comunicativas, que son independientes en cada sujeto, según cada estímulo que asimile, ingrese y gestione.

Es decir, cada individuo humano viene programado, desde antes de nacer a un determinado nivel de umbral y receptividad, que le permite asimilar y a la vez armonizar con su ambiente interno generando feedbacks para su repertorio basal.

Todo sujeto genera respuestas aceptables para su umbral positivo, dentro de ciertos patrones.

El afecto articulado y la pericia receptiva requiere una base fundamental esencial, donde se da el afecto, (amor reverente), como un nivel propio humano que forja receptividad.

Esto, desde la enseñanza y crianza de un adulto humano a un joven, o niño de menor edad, integrante de una plataforma de repertorios receptivos.

El repertorio individual es cultivable pacientemente, antes de la primera década del sujeto humano. Esto sugiere un repertorio de actitudes adultas sólidas, que sugieran e induzcan respuestas desde su nivel eferente al sistema nervioso receptor, del organismo y edad del menor.

Esto, caracteriza de diferente modo cada medio ambiente comunitario, patrón familiar socializador, o docente, que emitan los estímulos, previos, antes de conocer el repertorio funcional, socio-cultural y afectivo de un menor.

Por lo tanto, la semilla esencial es el afecto y el amor. El tiempo, es el tipo de cultivo que existe como la calidad afectiva, que posee el menor para iniciar una interaccion.

Según Shinishi Suzuki “dos cosas necesita una semilla, tiempo y estímulo”.

Es decir, la biología humana se deja impactar por el tiempo y un sujeto estímulo, mediando un ingreso de umbral y un resultado, relacionado con el molde que posee el ser humano al efectuar un feedback, o logro determinado de repertorio, en el cual la biología actúa de un modo predecible, cerrado.

El pozo de cada receptor humano se sintoniza con el amor, que emana el agua y calma la sed natural, que posee la estructura biológica y la pequeñez, o niñez del receptor.

Es decir, un niño necesita de un adulto que suscite su naturaleza receptiva, le haga tomar consciencia y dar señales de un umbral apropiado, ante sus potenciales repertorios.

Esto significa, que la voluntad y el conocimiento sean los ingredientes esenciales, que estimulan al adulto a enriquecer el vínculo, de saber moldear una conducta de intercambio emocional, en sí mismo con un menor, dentro de un determinado alero de mutua aceptación de los afectos.

El sistema nervioso y biológico individual de cada sujeto conduce a su nivel de satisfacciones. Pero esto involucra personas con cierta nivel de tacto y responsabilidad sobre los estímulos, simples o complejos, que suelen intervenir al interactuar con un semejante. Es decir, lo que en un modo temprano es la mayor vulnerabilidad y el nivel de inexperiencia del niño.

Lo simple se refiere al estímulo concreto de nivel material. Lo complejo, es el trasfondo afectivo, que se logra comunicar al sujeto, según cada edad del Emisor y Receptor.

En el último siglo se ignoro el trasfondo afectivo infantil. Es decir, se estuvo adjuntando al estímulo inicial de contacto una verdadera omisión de lo que existe en el niño, como individuo biológicamente dotado, desde su nivel de repertorio y feedback, antes de inaugurar un vínculo afectivo, de apego o aprendizaje inicial.

El ambiente externo no era igual para todo menor, ante los efectos que se busca en sus repertorios. Así, fue preciso evaluar detalladamente que necesidades individuales tiene satisfechas cada menor, por edad dentro de su medio ambiente familiar, como recurso cognitivo de afecto basal.

Esto fue más allá del modelo conductual ambientalista en boga. El modelo actual es más cognitivista, porque conduce a reflexionar en el estímulo, que aporta el docente y lo que es capaz de procesar, captar, recibir y aportar un menor, al asimilar una dosis de estímulos.

Esto implicó ir más allá del estímulo (E) y respuesta(R). A la medición y observación de la proactividad del menor se denominó el nivel de sensibilización de su estructura cognitiva (O).

El modelo quedó definido de la siguiente manera: Estimulo, (emisor) y Organismo que da Respuesta, (menor). Esto como nuevo modelo y paradigma.

Este avance involucró leer y recibir el feedback o respaldo emocional previo, (formativo del menor), mucho antes que se suponga un nivel de recursos cognitivos, a favor de los potenciales afectivos de un menor.

Es decir, se planteó el intelecto emocional volitivo natural de cada menor, previo al recurso cognitivo abstracto del docente, guiando a la familia,como feedback a los estímulos definidos de nivel basal o maduración, que involucra al niño.

El ámbito al que se ha cirscuncrito esta variable entre el docente y la biología del entorno infantil se define como el ambiente afectivo y propio sistema receptivo nervioso. Este incluye el ambiente familiar primario, el apego y los vínculos nuevos que demuestra el menor.

El menor sin la disciplina inicial de contacto está en pañales, llegando en condicioned diversas y deficitarias a educarse. Esto, al iniciarse el niño a ser estimulado en lo cognitivo, antes de obtener el nivel de madurez actitudinal precisa y esencial.

Al ser diferente este medio familiar en cada menor se intercala la etapa de previa estimulación, en el cual un menor pueda llegar a estar listo, para ser responder, ser incorporado y socializado, previo a ser evaluado y educado en un medio grupal formal tradicional.

El nivel de disciplina auditiva del niño es la variable familiar, que trae como repertorio emocional, al ser ingresado a un medio educativo.

Está línea base es medular para un evaluador y docente, que ha de ser maestr@, al recibir al menor que proviene desde su hogar.

Por lo tanto, instalar vínculos de destrezas emocionales paternas y maternas de apego es esencial, para ampliar el ámbito inicial de repertorios y contactos del menor, como educación emocional.

Es algo imprescindible al incorporarlo a la educación colectiva formal.

Esto contribuye al nivel de la intervención ajustada desde un diseño y un programa, que garantice el gradual avance de la estimulación, sin descuidar la armonía y la satisfacción inicial del menor.

Por lo tanto, desde la fisionomía del plan aplicado EOR lo que se potencia hoy desde el pre kinder es la inclusión de una línea base del individuo (O), como repertorio inicial del educando, antes de ingresarlo a la malla curricular del jardín y la escuela formal de infantes.

El nivel pre escolar es el nivel docente que requiere este esfuerzo para los padres, preparando el desapego y la adquisición de la confianza básica, como destreza blanda, que va a nivelar y permitir adaptarse al niño a su ingreso a su primera y próxima etapa formativa.

El feedback mutuo de alumno y maestro permiten hacer funcionar la dinámica EOR preescolar. El doble y mutuo feedback del niño y su nuevo maestro hacen la diferencia, que aporta cada alumno, al venir maduro desde su medio familiar natural.

La conducta y plan preliminar del maestro es abordar el espacio de apego, entre el menor y su familia, para normalizar el desapego en la dinamica original de la familia, permitiéndole armonía, (nivel de satisfaccion más saludable), al niño en el nivel de despegue y de aprendizaje colectivo, al cual será inserto.

Ser educador de destrezas emocionales requiere conocer y dominar el escenario biológico cerrado que trae cada alumno ingresando a la socialización, como pre-escolar. Es decir, el ambiente y escenario biológico, donde ocurren los intercambios y avances, entre las potencialidades y actitudes emocionales, como medio vincular agregado a los niveles de repertorio, la madurez del educando o niño.

La etapa del apego emocional infantil comienza en el primer trimestre intrauterino, donde la aceptación materna y paterna juegan un rol muy importante, para el proceso de desarrollo emocional, que tenga lugar cuando un menor entre al ore kinder. Estás variantes declaran niveles ansiosos del menor, que varían según cada caso particular de apego con la madre.

A medida que el proceso EOR se intala en la mutua consciencia infantil y materna, el profesor, el educando y su ambiente familiar permiten aumentar el proceso de interacciones y reforzar el lenguaje, verbal y no verbal, entre el menor y sus semejantes.

Así, surgen los sentimientos más esenciales del reconocimiento y la expresión, que el niño trae. Es lo que le permite expresar su propio nivel de madurez y apresto afectivo.

Las principales vías de la expresión emocional infantil son el lenguaje gestual, motor, no verbal y verbal. Esto, genera efectores de diferentes grados o repertorios en la respuesta emocional facial, el índice de interactividad , los signos de lenguaje expresivo y receptivo, que adquiere el menor.

Desde ahí surge el temperamento, la personalidad y el factor genético biológico, que media entre los estímulos educativos y los propios niveles de respuestas, (como niveles de efectores del niño).

Lo afectivo queda registrado en el nivel subcortical del ser humano, que es llamado amígdala subcortical y está en la zona inferior al sistema límbico, de cada lado cerebral. Es el sistema subcortical, que se extiende como una red ramificada a toda la red de efectores, que intervienen en la múltiple asociación neuronal, desde la zona receptora cerebral a cada uno de los órganos, que son responsables de las respuestas, (órganos efectores del cuerpo humano).

Aquí, se comprende: la piel, las glándulas, los órganos de los sentidos, como el ingreso del sistema somático automático del cerebro. Ello, provee el repertorio y bagaje o engranaje de cada célula neuronal, hasta llegar a los diferentes órganos que producen las respuestas individuales, o feebdback adaptativo del menor.

El sistema límbico subcortical de cada lado cerebral en gran parte almacena y memoriza, lo que llega a la zona de la amígdala y nivel de consciencia, o nivel de umbral receptivo.

Así, se proveen las respuestas emocionales a los efectores, a nivel endocrino, automático y al cortical superior, de ambos lados del cerebro. Un lado es el cortical de bajo umbral,que es el derecho. Este suele ser defensivo, automático e involuntario, actuando ante emergencias. El otro, es de alto umbral, que es todo el nivel más sereno, confiado, creativo, reflexivo o resiliente, que es tolerante y muchísimo más controlado, o voluntario.

El hipocampo archiva vivencias una vez clasificadas y determina cada nivel de umbral y grados de consciencia habitual del sujeto, desde el nivel del temperamento, (niveles de ansiedad y manejo defensivo del medio) y la propia personalidad creativa más reposada y confiada.

El sistema límbico sub cortical no es accesible a la voluntad, porque es la zona subcortical, tanto derecha e izquierda del sujeto, que memoriza Responde de modo automático, para la sobrevivencia, incluyendo las defensas inmunológicas del menor y su organismo.

Ejemplo: el miedo y la irritabilidad pueden provocar cierta ansiedad flotante, como rechazo, agresión y algunas conductas defensivas, desadaptativas e inmediatistas, que colapsan al sujeto, con llanto y miedo.

Esto varía, según como sea la crianza y los modelos más cercanos, que posea con los adultos significativos el menor.

Si el umbral de ansiedad es alto el menor habitualmente reacciona voluntariamente de un modo más calmado, sereno y saludable, hasta adaptarse al desapego inicial.

Si hay reacciones de bajo umbral automáticas, de emergencia, existe mayor irritación y mal humor. El sujeto puede realizar más somatizaciones, alteraciones cardíacas, respiratorias, ocasionando gastos adrenergicos para su organismo. Esto, con las consecuentes secuelas de salud baja de inmunidad y posibles secuelas psicosomáticas.

Ello le afecta el sistema adaptativo del niño, desde el principio del corte umbilical y el nacimiento, definiendo la forma del propio temperamento y la modalidad premórbida de la personalidad.

Si una persona es de umbral alto de respuesta su sistema inmunológico es calmado y su salud muchísimo más estable. Por lo tanto, si la persona tiene frecuentes niveles altos de respuesta calma y reflexiva tendrá más tiempo para reflexionar, estar serena y evitar caer en una reacción inmediatista. Esto, le permite al niño saber confiar y controlar los impulsos, pudiendo protegerse más oportunamente su salud general.

La ansiedad en el flujo sanguíneo provoca bajos umbrales habituales de respuestas, marcado por rasgos irritables, de temperamento y personalidad en el sujeto.

Esta ansiedad recurrente predispone respuestas adrenergicas, reacciones inmediatistas, temores o irritabilidad, que hacen más dependiente al individuo, pudiendo tener acceso a bloqueos, predisposición a ciertas adicciones, con un bajo umbral de consciencia para sus respuestas generales.

Esto, conlleva al colapso emocional y la dificultad para generar dominio en destrezas blandas. El sujeto responde con mucha frecuencia los juicios externos sin tolerar las críticas con reacciones bruscas, lenguaje grosero y tono emocional irritable con coprolalia, que son las frecuentes muletillas de garabatos comunes.

La ansiedad responde a un mayor nivel de cortisol, que es muy adictivo. Esto descarga colapso y bloquea las defensas inmunológicas del individuo perjudicando su salud general.

Por eso, si una persona adquiere una rutina emocional saludable procura ser reflexiva, calmada y resiliente, sabiendo dominarse más frecuentemente, teniendo un mejor nivel de respuestas ante los estímulos adversos.

El organismo puede aprender a calmarse y esto implica ser capaz de cambiar el colapso habitual por más respuestas de alto umbral, que significan menos costo, al sistema general y más reacciones reflexivas serenas. Esta actitud y destrezas blandas permiten evitar enganches de violencia y defensividad continuas.

Así, una persona adulta con respuestas tardías de cólera y pánico representa un nivel más amplio de destrezas inteligentes, porque posee un mayor nivel de ajuste emocional y un dominio armonioso y saludable de las respuestas adrenergicas.

P.ACE. Perfil de evaluación de Aptitudes Colaborativas y Empaticas del escolar, (este feedback psicométrico infanto juvenil es domiciliario). Reservas visitas domiciliarias al +5654674133.

En esta oportunidad se ofrece evaluaciones lúdicas psicométricas infantiles para rehabilitación y estimulación neuro-psicomotriz, enfocada al alumno de 6 a 12 años. Se observa y detecta fortalezas y déficit neuropsicopedagogicos para dominar un perfil potencial de estimulación, partiendo de una línea base. (Bench marking infantil psico neuro pedagógico). Se ofrecen 4 visitas por el valor de una psicometría, con un máximo de 180 minutos lúdicos vde observación participante a domicilio. esto, siempre y cuando exista un salón sin distractores del estudio, o sin juegos, juguetes y equipos electrónicos, que distraigan el trabajo pedagógico. Esto va desde 20 minutos continuados, con varios descansos. Así completando 180 minutos máximo, dependiendo del nivel de agotamiento y la hora del día, en que se observe a cada escolar.

La modalidad domiciliaria es un paquete 4x 1, dados los costos que exige adaptarse a los recursos familiares. Se paga adelantado, una hora antes de la sesión. Esto incluye Uber ida y regreso para terapeuta y materiales. El valor de los 180 minutos es $50.000, que equivale a 1.5 UF.

Se dará un informe de todo el plano de las Aptitudes cognitivas, duras y blandas específicas, para el desarrollo del aprendizaje. Estas aptitudes y perfil infantil permite observar: Memoria ,(lado derecho e izquierdo), Motricidad (para Escritura, visión, Lectura, Motricidad kinestesica, derecha e izquierda, Audición, incluyendo las conductas de atención y discernimiento intelectual. Además, se evalúa la Recepción lingüística comprensiva, la Expresión lingüística, (comprendiendo las habilidades que evalúan ambos lados cerebrales). Se observa respuestas emocionales de fatiga, tolerancia a la frustración y motivación de logros, aplicada durante evaluaciones, (tanto del lado derecho e izquierdo del cerebro).

En particular cubriendo todo el barrido y repertorios conductuales de cada niñ@. Esto se hará con varios testd, que incluye la Batería Neuropsicológica Luria Nebraska, Revisión infantil, adaptación de Chile. (Mercader y Concha, 1993).

PACE es un perfil de todas las áreas cerebrales, junto con una observacion participante de destrezas blandas, como el nivel colaborativo y empático, que posea adquirido cada alumn@. Es decir, los repertorios psicosociales, aprendidos, entre las edades escolares indicadas.

Se entrega un informe de psicometría detallado con el enfoque Post racionalista. Es decir, las observaciones arrojadas por funciones, que detecta la Batería Neuropsicológica Luria Bebraska, de la Revisión Infantil chilena.

Esta batería fue adaptada y validada para nuestro país, en el año 1987 y 1988. Su evaluación obtuvo la validez con niños dañados en funciones motoras, (realizada, por Capo, 1995). Además, junto con dichos estudios de adaptacion y validación de obtuvo las tablas estandarizadas para Chile y Sudamérica.

Aparte, se ofrece a padres y profesores charlas y sesiones de habilidades blandas, para apoyar la adquisición del desarrollo emocional, con posterioridad a los informes de l@s niñ@s.

En especial, a l@s que pudieren estar sufriendo de alguna alteración en su motivación y autoestima, a contar de la presión y competencia ocasionada, durante la inserción en el nivel escolar, desde la post pandemia.

Además, se incorpora un apoyo docente online escrito y personalizado a los más de miles de profesores involucrados, desde que su labor escolar se viera obstaculizada, en este último periodo de educación infantil chilena.

Salud y resilencia

Las personas pueden cultivar la salud psicológica y emocional desde la opción de su trabajo espiritual.

Una persona puede ser feliz desde la condición de su psicología personal y sus estrategias de resiliencia.

Aplicar destrezas blandas, como empatía, inteligencia emocional varonil y femenina puede hacer un excelente tejido de conductas.

Esto favorece la condición saludable de la psiquis, dentro de la vida familiar, laboral y societal.

La coherencia de actitudes y destrezas blandas es señal de madurez, capacidad de admiración y práctica de psicología resiliente, en las relaciones interpersonales.

Un proceso de equipo y trabajo colaborativo requiere personas con nivel de ajuste empático, diálogo flexible y autoestima para determinadas funciones interpersonales. Ser capaz de funcionar de modo saludable y maduro es atrayente, muy gratificante y constructivo.

Esto conduce a ser aceptado, amado y admirado. Este nivel de actitudes blandas favorece el intercambio y las virtudes humanas de colaboración y motivación a largo plazo.

Ello es fundamental cuando se trata de aprender y evolucionar desde las relaciones interpersonales.

Para ser saludable, maduro y amable es necesario tener autonomía, tanto para comportarse, hablar y sentir.

Este dominio de conductas favorece poder educar, enseñar y aprender unos de otros las conductas y habilidades blandas, que son básicas para el diálogo intrapersonal.

Amar y querer su persona

Las personas pueden querer muchas cosas y objetivos particulares. Sin embargo, amar su persona u otra entidad de su ambiente, supone distinguir que no sea una simple condición material.

Amar es una función del alma que es completamente abstracta. Sin embargo, se puede sentir con la actitud, la sensibilidad intuitiva y con el lenguaje tonal, gestual y corporal.

Saber amar implica admirar al otro ser con las actitudes propias de saber sentirlo y percibirlo tal cuál es. Esto muchas veces implica abstraer lo concreto de su persona. Querer en cambio sólo conlleva a poseer, desear y tener una cosa, u objeto.

Saber amar es una expresión que se da a un otro ser semejante, cuya persona puede llegar a ser conocida, admirada y atrayente. Esto porque se conduce de forma interpersonal dada y usa una determinada tonalidad, un apropiado lenguaje no verbal, junto a gestos, palabras y actitudes que representan ademanes amatorios.

Esta capacidad impulsa a estar dispuestos a ser significativos de un modo estable y optimista. El querer es muchísimo más inmediatista y cortoplacista. Se pueden querer un objeto de una vitrina, una situación externa, o un determinado nivel de definición y presentación de los objetos.

Sin embargo, amar la propia persona y la vida de un individuo es una expresión muchísimo más profunda, estable y satisfactoria. Representa un sentimiento, una acción continua y un pensar que hace absolutamente consecuente y más coherente a las personas entre si.

Cuando se siente y constata que se ama y se es amado muchas veces la persona puede ser feliz, aún sin estar satisfecha del todo lo material. El estar satisfech@ y ser capaz de rasgos estables le permitirán sentirse más persona.

Esta condición contribuye a generar la propia personalidad y la psicología natural de sentirse una persona satisfecha, amada y autónoma, que es consistente, desde su comprensión, su comportamiento y su sentir, porque se conduce de un modo más coherente.

En general, esas destrezas son muchísimas. Pero se pueden enumerar en un medio verbal sin poder aplicarlas al no existir un lenguaje gestual y tonal adecuado o coherente.

Sanacion del espiritu

La salud psicológica y espiritual está en intima relación con el nivel de pensamientos de estrés y el bloqueo a nivel de las emociones de armonía, paz y resiliencia, que se practiquen a nivel de las cogniciones.

Si en algún momento se sorprende en

una situación que amerite ser abordada o mejorada la mejor psicología induce a saber conservar la calma.

Para ello, se recomienda redactar y empapar por escrito la situación reformulando lo que se piensa, o decreta sentir, como practica de una propia psicología y estrategia de sanación.

Ello puede requerir encaminar

a su persona a tomar decisiones, que le lleven a pensar en la superación de obstáculos, evitando juicios que le distraen, a nivel de su conocimiento.

Ante ello, permitirse tener y contar con esa psicología le dará estrategias para ser escuchado y le dará la posibilidad de reflexionar sobre como actuar y reformular su psicología al momento de modificar y desbloquearse.

Dudar, tener miedo, o temer hablar son formas de evitar ser consistente para impulsar su psicología resiliente. Muchas veces esta posición da lugar a gozar de empatía personal, para facilitar el abrir un propio abanico de posibilidades para saber recuperarse y sanarse.